El Betadine es un antiséptico que la mayoría de personas tienen en su casa. Sin embargo, una gran duda que se suele tener es si este lo podemos utilizar en nuestros compañeros peludos de cuatro patas. ¿Será peligroso para ellos? ¿lo puedo utilizar o no? ¿pone en riesgo su salud? ¿cuándo es recomendable utilizar? ¿cómo hacerlo?
Lo primero que tienes que conocer para que mantengas la calma es que sí puedes utilizar este producto en la piel de tu perro. No pasa nada si lo utilizas de forma respetuosa y sabes cómo y cuándo aplicarlo.
También es importante conocer que, el Betadine, es solo la marca comercial de un producto, pero detrás de eso, se encuentra el yodo, que es la sustancia con poder curativo.
¿Cuándo utilizar el Betadine en perros?
El Betadine se puede poner en la piel de tu perro cuando tu compañero sufra una herida pequeña, una infección en la piel por algún motivo como las que provoca la sarna en perros, una rozadura producida, por ejemplo, por el arnés, una herida en la almohadilla, un corte o una quemadura con una extensión de pequeño tamaño.
¿Cómo puedes utilizar el Betadine?
Siempre y cuando la herida no sea muy grande podrás curar tú mismo a tu perro, pero no olvides que en grandes lesiones lo mejor es que lo vea un especialista porque quizá no es suficiente poner Betadine y que el animal necesite antibiótico o alguna pomada extra para que cicatrice y cure mejor la herida.
Ahora bien, este el método de actuación cuando la herida sea leve:
1. Recorta el pelo de alrededor de la herida para que haya mayor higiene en la lesión, Se debe dejar el pelo lo más corto posible, como mínimo, a un centímetro de distancia de la herida.
2. Lava bien la piel, tanto la que sufre la herida como la que está alrededor de esta. Esto lo debes hacer con agua y jabón, después, seca bien la zona.
3. Coge el Betadine y haz una mezcla mitad y mitad con agua de botella para rebajarlo. Una vez tengas esta mezcla, utiliza una gasa y evita usar algodón ya que las fibras de este material suelen quedar impregnadas en la herida y podrían empeorar la lesión.
Cuando tengas la gasa en tu mano sumérgela en la mezcla y ponla en la herida moviéndola desde dentro hacia fuera para arrastrar el contenido de pus o sangre y la suciedad hacia el exterior de la herida.
4. Deja secar el Betadine, no trates de retirarlo porque reducirás su efecto.
5. Tienes que repetir la operación en varias ocasiones. Esto es, hazlo entre dos y tres veces al día para ayudar a la piel de tu perro a cicatrizar y a curar mejor.
Ten en cuenta que las heridas pequeñas y leves no se deben cubrir porque curan mejor al aire libre. En cambio, heridas más grandes sí se tienen que tapar para evitar que aumente la infección.
¿Cuándo no tienes que utilizar el Betadine?
Si utilizas bien el producto no tiene por qué ser peligroso para tu perro, aunque tienes que saber que no siempre puedes utilizarlo y, lo mejor, es tener en cuenta estas recomendaciones:
- Evita los tejidos delicados como las mucosas, esto es, por ejemplo, el interior de la boca o labios, los ojos, la vagina o el escroto.
- Si al aplicar el Betadine tu perro comienza a rascarse efusivamente tienes que lavarle la zona con abundante agua para retirar el producto. En este caso, podrías utilizar oro antiséptico como la clorhexidina para limpiar y curar las heridas. A veces esto ocurre porque el Betadine seca mucho la piel.
- Hay ciertos componentes o productos que lo inactivan. Estos son el mercurio, el agua oxigenada o la plata.
- No lo uses ni para curar heridas bucales ni cerca de esta porque podría ingerir el producto y producir daños.
Hay un motivo por el que el Betadine es tóxico
Aunque en la mayoría de las situaciones el Betadine es inofensivo, no siempre es así. Como hemos comentado antes, nunca lo utilices en la zona oral ni dentro de la boca porque, si tu perro lo ingiere podría causarle daños graves.
El Betadine es yodo y si entra en contacto con la sangre y viaja hasta la glándula tiroidea, será absorbido allí y puede desencadenar un desequilibrio en este órgano, pero… ¿por qué? Este va a interferir en la producción normal de la hormona tiroidea produciendo un exceso en esta hormona que puede llegar a ser muy peligroso para el animal.
Sin embargo, para que esto ocurra se debe ingerir grandes cantidades del producto yodado. No obstante, más vale prevenir que curar y, lo mejor es que, después de tratar a tu perro le ofrezcas un snack o premio para que no se toque la herida y pueda secar con normalidad sin que él se chupe ni ingiera el producto.
En definitiva, sí puedes utilizar el Betadine como norma general. Solo tienes que tener en cuenta diferentes situaciones y no usarlo cuando no sea recomendable o la zona no sea la adecuada. Para eso, existe otros productos sustitutivos como pomadas o clorhexidina.
Si la herida fuera de gran tamaño, deberías acudir a tu veterinario de confianza porque, seguramente, el tratamiento de la herida será distinto y necesitará otro tipo de tratamiento que incorpore un antibiótico oral.