Escoger un hurón, conejo, periquito o gecko leopardo como animal de compañía conlleva trae consigo más responsabilidades que las que podemos tener (que no son pocas) si optamos por un perro o un gato. ¿Por qué? Porque se trata de animales exóticos cuyas necesidades son muy específicas y cuyo conocimiento sobre su tenencia, alimentación y comportamiento no está tan estudiado, ni es tan amplio.
Esto significa que mantener un animal exótico en casa va a requerirnos, por un lado, más conocimientos sobre la especie que escojamos y, por otro lado, siempre que tengamos que pasarle la revisión veterinaria será acudiendo a un especialista en exóticos (cuyo coste es un poco mayor que los veterinarios generalistas).
En España, 'exótico' casi siempre quiere decir 'pájaro'
El mundo de los animales exóticos es amplio, yendo desde clásicos roedores como hámsteres, cobayas o ratas, a serpientes, lagartos o arañas. No obstante, las familias españolas prefieren la compañía de las aves frente a otros animales exóticos, según el estudio de censos de mascotas realizado por la Asociación Nacional de Fabricantes de Alimentos para Animales de Compañía (ANFAAC) y Veterindustria del año 2021, que contabiliza más de cinco millones de ejemplares en los hogares (solo por debajo de perros, gatos y peces).
Al igual que debemos hacernos numerosas preguntas antes de adquirir un animal de compañía, si optamos por aves psitácidas (las más comunes de ver en los hogares españoles son los agapornis, los periquitos australianos y las ninfas), debemos plantearnos, no solo si seremos capaces de cubrir sus necesidades, también si somos económicamente capaces de mantenerlos, lo que nos lleva a la pregunta ¿cuánto cuesta tener un loro?
Incluso los loritos más baratos son caros de mantener
El precio en sí de una psitácida como un periquito, agapornis o ninfa no es excesivamente alto. Estamos hablando que podemos adquirirlos en tiendas por menos de 100 euros, por lo que puede confundir a los compradores y hacerles pensar que su mantenimiento no será costoso.
Empezando por los costes veterinarios, "la media de consulta en Madrid, donde existen varios especialistas en aves, suele costar una media de 45 euros, con oscilaciones entre los 37 y los 48 euros", explica Andrés Montesinos, doctor en veterinaria, especialista acreditado en medicina de animales exóticos y director del hospital de animales exóticos Los Sauces (Madrid).
"En la consulta se revisa la dieta del animal, su comportamiento y luego se pasa a explorarla medicamente, pesándolo y buscando que todos sus indicadores de salud sean correctos", añade el especialista. "Por supuesto, a veces hay consultas más baratas, pero no siempre son atendidas por especialistas".
Este tipo de revisiones es recomendable hacerlas al menos una vez al año. "Al no hacer vacunaciones anuales, recomendamos el chequeo anual", expresa el especialista en medicina de animales exóticos.
Sin embargo, un chequeo no es lo único que deberíamos hacerle a nuestros loros. A veces podríamos necesitar de otras pruebas como analíticas o TAC, ya sean para determinar un problema que haya surgido o simplemente por hacer una valoración completa del animal.
"Las analíticas suelen ser caras, aunque depende de lo que incluyan", afirma Montesinos. "Generalmente se hacen análisis hematológicos (que permiten ver si el animal está anémico, cómo están sus defensas, si tiene suficientes plaquetas, etc.) y de bioquímica sanguínea (que incluye la valoración del riñón, del azúcar, del hígado, del calcio y del colesterol, algo muy importante en el caso de los loros). Algo así de completo "puede costar 100 euros".
En cuanto a los TAC, "deben incluir una adquisición (toma de fotos) sin y con contraste. Uno de buena calidad que permita ver con detalle los órganos de estos animales tan pequeños puede costar unos 350 euros", añade Montesinos.
Por suerte, los TAC no serían necesarios a priori ya que si las analíticas de nuestro loro están en orden, hay muy pocas posibilidades de necesitar de esta prueba.
Por suerte, los medicamentos de estos animales son de lo que menos nos debemos preocupar (económicamente hablando), ya que son relativamente baratos. "Los loros son animales pequeños y, por tanto, consumen cantidades pequeñas", explica el especialista.
Llegados a este punto podríamos asumir que, de media, el coste de un loro sano sería de "unos 300 euros al año en cuidados veterinarios", una cantidad a la que debemos sumar una adecuada alimentación y el coste de un hábitat grande que les permita desarrollar sus comportamientos naturales de la forma más similar posible a como si estuvieran en libertad (con el enriquecimiento ambiental pertinente).
Además, en caso de que nuestro loro sufra alguna enfermedad, se de algún golpe y tenga que ser intervenido quirúrgicamente, debemos estar preparados para una factura de entre 500 y 600 euros que cuesta "generalmente la anestesia, la cirugía en sí, el pre y postoperatorio", concluye Montesinos.